“El Teatro Colón tiene un grandísimo defecto; su acústica es perfecta. Imaginen ustedes lo que eso significa para un cantante. Si uno hace algo mal, se nota enseguida”, así lo definió el tenor italiano Luciano Pavarotti, en una de sus varias visitas a la Argentina. No solo él tuvo elogiosas palabras para con la calidad sonora de este palaciego recinto inaugurado en 1908, su leyenda se fue construyendo y la fueron validando directores de orquesta como Arturo Toscanini, Zubin Mehta y Daniel Barenboim; compositores como Igor Stravinsky y Richard Strauss; cantantes como María Callas, Plácido Domingo y Claudia Muzio; y bailarines como Rudolf Nureyev, Anna Pavlova, Mijail Barishnikov, y Vaslav Nijinsky, entre varias otras figuras que se han subido a este escenario a lo largo de más de un siglo de gloria. Desde la Filarmónica de Viena hasta la Sinfónica de Nueva York, los máximos referentes del mundo de la ópera, de la música sinfónica y de cámara pasaron por aquí.
Joya de la arquitectura universal
Las excepcionales condiciones acústicas y arquitectónicas de su edificio lo colocan a la altura de teatros como la Ópera de París, la Scala de Milán, la Ópera de Viena o el Metropolitan de Nueva York. Se trata de una majestuosa construcción inaugurada en 1908, cuyo diseño ostenta todo el esplendor palaciego europeo al que adscribía la pujante y elegante Buenos Aires de entonces. Sus líneas sintetizan las reglas y las tendencias arquitectónicas de la época. No se puede hablar de un solo estilo definido, sino de un eclecticismo que fue propio de la construcción de principios del siglo XX. El hall de entrada está revestido de mármol de Verona y estuco símil mármol. La escalinata es de mármol blanco de Carrara y las barandas que la circundan son de mármol de Portugal. A ambos lados del pie de la escalera, las barandas terminan en dos cabezas de león talladas a mano en piezas completas.
El recinto mágico
La sala principal, en forma de herradura, cumple con las normas más severas del teatro clásico italiano y francés. La planta está bordeada de palcos hasta el tercer piso. La herradura tiene 29,25 metros de diámetro menor, 32,65 metros de diámetro mayor y 28 metros de altura. Cuenta con una capacidad total de 2.478 localidades, pero también pueden presenciar los espectáculos alrededor de 500 personas de pie. La cúpula, de 318 metros cuadrados, poseía pinturas de Marcel Jambon, que se deterioraron en los años treinta. En la década de 1960 se decidió pintar nuevamente la cúpula y el trabajo le fue encargado al pintor argentino Raúl Soldi, que la inauguró en 1966.
Visitas guiadas todos los días
El Teatro Colón guarda secretos en cada rincón y vivir la experiencia de una visita guiada es conocer una porción de su historia de más de cien años al servicio de la cultura argentina y mundial. En la Sala, en el Foyer Principal, en la Galería de Bustos y en el Salón Dorado el visitante puede sentir el embriagador efecto de una ambientación fascinante y de una atmósfera cargada de leyenda. Las esculturas, las luces de los vitreaux parecen estar diciendo algo.
Horarios
Hay visitas guiadas todos los días, excepto el 1º de mayo, 24, 25 y 31 de diciembre y 1º de enero. Las salidas son cada 15 minutos de lunes a domingos, de 10 a 16:45 horas.
Recorrido
Foyer, Galería de Bustos, Salón Dorado y Sala Principal. Lógicamente, el circuito podrá verse afectado por eventos, funciones, ensayos, refacciones u otras actividades propias del teatro.
Duración: 50 minutos.
Cupo: 34 personas.