La Bombonera es el corazón de Boca Juniors, y uno de los estadios más famosos del mundo, gracias a la fiesta que se vive allí durante cada partido. No es un espectáculo que se dé solo puertas adentro, sino que las calles del barrio empiezan a palpitar la emoción incluso horas antes de que comience.
A esta altura, la cancha, que oficialmente se llama Alberto J. Armando, se convirtió en una especie de monumento del fútbol. Antes de llegar a esta construcción, inaugurada en 1940, el club era local en una con tribunas de madera.
Tiene una estructura en forma de herradura, con tres bandejas superpuestas y un empinado ángulo de inclinación que lo asemeja a una caja de bombones, de ahí su nombre popular. Los pocos metros que separan el campo de juego de las tribunas permiten una gran proximidad entre los espectadores y los equipos, lo que hace que la experiencia de ir a ver un partido sea indescriptible.
Como sucede en distintos puntos del barrio de La Boca, en La Bombonera también hay un mural hecho por Benito Quinquela Martín, justo en el hall de entrada. Además, en el exterior, hay obras de Pérez Celis y Rómulo Macció.
Además, no te podés perder el Museo de la Pasión Boquense, ubicado debajo de una de las tribunas. Tiene todos los objetos y tecnología necesaria como para conocer y dimensionar los principales logros del xeneize.
Curiosidades
¿Sabías que, de acuerdo con los diarios ingleses The Observer y The Sun, ir a La Bombonera a ver un partido entre Boca Juniors y River Plate, es “la experiencia deportiva más intensa del mundo” y “el número uno entre los 50 espectáculos deportivos que hay que ver antes de morir”?
Otro dato increíble: la cancha fue inaugurada el 25 de mayo de 1940, ¡justo el mismo día en el que se celebra el aniversario de River Plate!